Banco Santander, presidido por Emilio Botín, ha alcanzado un acuerdo con el Bank of América Merrill Lynch, al que ha vendido una cartera de crédito por un importe superior a 1.000 millones de euros, según han informado fuentes del mercado.
La operación se enmarca en la estrategia del Banco Santander de reducir su exposición inmobiliaria y atenuar el peso de sus activos de riesgo.
Con anterioridad, Banco Santander vendió créditos hipotecarios y al consumo por un importe de unos 1.500 millones de euros a los fondos Fortress, Cerberus y Lone Star.
Al desprenderse de este tipo de activos, la entidad liderada por Emilio Botín sigue adelante con su estrategia de centrarse en su negocio principal y soltar cargas para aligerar su balance.
Otros bancos españoles están sondeando al mercado para llegar a acuerdos similares.
El pasado mes de mayo, BFA-Bankia se desprendió de una cartera de 800 millones de euros en créditos al consumo impagados de particulares y de pymes, que vendió a dos fondos «buitres», el fondo noruego Aktiv Kapital y el luxemburgués Oko Investments.
Por otra parte, y en el marco de esta estrategia de operaciones de desinversión, el Banco Santander se ha mostrado muy satisfecho por la gran acogida entre los inversores que ha tenido recientemente la salida a Bolsa de su filial mexicana, cuyos títulos registraron un incremento de su valor del 12% en menos de una semana.