La producción de flores en Venezuela ha crecido desde el año 2002 un 300 por ciento, gracias a la política de apoyo del Gobierno y al convenio Rusia-Venezuela para este sector.
El vicepresidente de la Asociación de Productores de Flores del Estado Miranda, Mario Da Costa, ha señalado que “gracias a la política de respaldo del Gobierno hemos crecido notablemente en el sistema flores no sólo para exportar (a través del convenio Rusia-Venezuela) sino también para cubrir el mercado nacional”.
Las Lilium, Gerberas, Gladiolas, y plantas exóticas como ‘Microfonos’ y ‘Bastón del Emperador’, son algunos de los tipos de flores y plantas que Venezuela exporta a través del convenio Rusia-Venezuela.
El Estado “Miranda está colaborando con un 20 – 30 por ciento de la producción de estas flores para ser exportadas por la Empresa Mixta Ruso-Venezolana Orquídea S.A.”.
Mario Da Costa asegura que en el caso particular del Estado Miranda, el crecimiento y la consolidación de la siembra florícola ha permitido potenciar este sector de producción. Hoy en día, existen alrededor de 250 floricultores censados.
Por otra parte, Da Costa ha indicado que el sector floricultor espera, en un lapso de cinco años, convertirse en el primer productor de Anturios (Anthurium andreanum) en América Latina.
Anturios es una flor originaria de Suramérica, y en Venezuela “tenemos todo el potencial del trópico para producir esta flor de calidad para exportar (…) Las proyecciones son seguir creciendo, los productores se mantienen haciendo importante inversiones en sus fincas”, asegura Da Costa.
Mario Da Costa también es el director de la oficina de Desarrollo Agrícola de la Alcaldía de Guaicaipuro. Esta división se encarga de realizar censos y diagnósticos, que van a permitir afianzar vínculos con los productores, para que a través de los entes del Gobierno se puedan continuar impulsando la financiación, con el objetivo de potenciar la siembra en la zona. Se tiene previsto que para el mes de junio esté listo el análisis. La zona priorizada es la de Altagracia de la Montaña, por su amplia extensión productiva. Luego se continuará con Tacatá, Cecilio Acosta, Paracotos y posteriormente San Pedro de los Altos y El Jarillo.
Las áreas de Altagracia, Paracotos y Tacatá producen ganadería, frutas y hortalizas, como el ají dulce, pimentón, plátano, banana, ñame, cebollín y cilantro. Por su parte, San Pedro y El Jarillo destacan como zonas de gran producción hortícola para todo el país sudamericano.