El Banco de España ha señalado que los bancos centrales están avanzando en temas de sostenibilidad, pero ha recordado que los gobiernos son los que deben liderar esta lucha.
En un artículo publicado esta semana ha indicado que los bancos centrales pueden desempeñar un papel relevante como catalizadores y «liderar con el ejemplo» para contribuir a alcanzar los objetivos del Acuerdo de París.
Los bancos centrales han avanzado en el conocimiento y, en menor medida, en la cuantificación de las implicaciones macroeconómicas y macrofinancieras del cambio climático y de las alternativas para contrarrestar sus efectos indeseados.
La mayor parte de estos bancos centrales han comenzado a incorporar principios de inversión sostenible y responsable en el diseño de las políticas de inversión propia, mientras se discute el posible papel de estos temas en el diseño de los marcos de política monetaria.
No obstante, el Banco de España ha destacado que los avances se determinan por la necesidad de entender bien las consecuencias y los canales de transmisión hacia la economía y el sistema financiero de los riesgos climáticos y medioambientales. En este sentido, «es clave» la disponibilidad de información y de datos.
Por otro lado, el ente ha recordado que el liderazgo en la lucha contra el cambio climático «ha de corresponder necesariamente a los gobiernos. Los bancos centrales, no obstante, pueden desempeñar un relevante papel de catalizadores en muchas esferas, contribuyendo con el ejemplo».
El Banco de España ha propuesto acelerar los avances hacia una mayor transparencia en el mercado introduciendo requisitos de divulgación vinculados con el clima para que una emisión o un emisor sean elegibles en los programas de compra de activos.
El Banco de España es el banco central nacional y, en el marco del Mecanismo Único de Supervisión (MUS), el supervisor del sistema bancario español junto al Banco Central Europeo. Su actividad está regulada por la Ley de Autonomía del Banco de España.