Moody’s ha rebajado la nota soberana de Reino Unido a “Aa2” desde “Aa1”, ya que considera que el plan del Gobierno británico para corregir las finanzas públicas ha perdido el rumbo, y el ‘Brexit‘ va a pesar sobre la economía del país.
Reino Unido redujo su déficit de presupuesto desde cerca de un 10% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2010 a un 2,3% en el año fiscal 2016/17 que culminó el pasado mes de marzo. Además, el Gobierno británico tiene previsto recortar su deuda como proporción del PIB a partir del periodo 2018/19.
No obstante, Moody’s ha señalado que el panorama de las finanzas públicas se ha debilitado porque los planes de consolidación fiscal del Gobierno deben hacer frente a una serie de cuestionamientos y porque se espera que la carga de deuda siga incrementándose.
Por otro lado, las presiones presupuestarias podrían aumentar ante el debilitamiento de la economía británica cuando se formalice su salida de la Unión Europea, lo que distraería al Gobierno de otras prioridades.
La agencia de calificación ha explicado que “las presiones fiscales se exacerbarán por la erosión de la fortaleza económica de mediano plazo del Reino Unido, probablemente como resultado de la manera en que salga de la Unión Europea, y por los desafíos aparentemente cada vez mayores para la política monetaria dada la complejidad de las negociaciones del ‘Brexit’ y las dinámicas políticas locales asociadas”.
El Gobierno de Reino Unido ha señalado que la evaluación que ha realizado Moody’s sobre el impacto del ‘Brexit‘ es “obsoleta”, porque la primera ministra británica, Theresa May ha establecido un plan ambicioso para las relaciones futuras con la UE.