El Producto Interior Bruto (PIB) de Italia ha perdido un 0,6% durante el primer trimestre de 2013 respecto al trimestre anterior, en el que ya se había reducido un 0,9%, según ha publicado Istat, la oficina italiana de estadística.
Estos datos implican un deterioro mayor de lo previsto (-0,5%), y supone acumular siete trimestres consecutivos en recesión. De este modo, la actividad de la economía italiana en el primer trimestre del año sufrió una contracción anualizada del 2,4%, una décima por encima de la estimación inicial.
Por su parte, las exportaciones italianas registraron una caída del 1,9%, su peor lectura desde el primer trimestre de 2009, mientras que en términos interanuales bajaron un 0,2%.
A su vez, las importaciones cayeron un 1,6% trimestral, su noveno trimestre consecutivo a la baja, mientras que respecto al primer trimestre de 2012 la caída fue del 5,2%.
Por otro lado, la producción industrial italiana registró en abril una caída mensual del 0,3%, en valores ajustados al calendario, mientras que respecto al año anterior el descenso fue del 4,6%.
En base a estos datos, la producción industrial del país transalpino ha descendido en los cuatro primeros meses del año un 4,4% respecto al mismo período de 2012.