Banco Santander, presidido por Emilio Botin, ha anunciado que ofrecerá a partir del 1 de agosto una moratoria de capital de tres años para aliviar la situación de sus clientes, tanto particulares como autónomos.
Banco Santander aplicará esta moratoria a los clientes con causas objetivas de problemas económicos, como estar en paro o haber sufrido una caída de sus ingresos de más del 25%, y que tengan dificultades transitorias en el pago de sus hipotecas sobre vivienda habitual.
Los clientes tendrán la posibilidad de alargar el vencimiento del crédito, para compensar el periodo de carencia, sin que cambien las condiciones financieras del préstamo, ni durante el periodo de carencia, ni al finalizar el mismo.
Con esta medida del Banco Santander, una familia con una hipoteca media de 125.000 euros a un plazo de 25 años que actualmente paga una cuota mensual de 590 euros (a un tipo de referencia del 2,20% más un diferencial de 0,75%) vería reducida significativamente su cuota mensual, que quedaría en 307 euros, un 48% menos.
Otras alternativas como ampliar el plazo de la operación a 30 años, pero sin establecer periodo de carencia de capital, reducirían la cuota mensual un 11%, hasta 524 euros. La moratoria servirá para mitigar el impacto social que la crisis económica tiene sobre muchas familias, cuya pérdida de ingresos provoca problemas de pago con sus deudores.
Alfredo Sáenz, consejero delegado del Banco Santander señaló: “Nuestro objetivo es seguir apoyando a nuestros clientes, anticipándonos con soluciones que les permitan ajustar sus cuotas mensuales a su capacidad de pago”.
Además, Banco Santander ha propuesto impulsar medidas a nivel sectorial y en las que se impliquen todos los agentes involucrados en el sistema hipotecario para contribuir a hacer frente al problema social que supone el aumento de familias hipotecadas con dificultades de pago.
En esta misma línea, el pasado mes de Mayo, el Santander UK, presidido por Ana Patricia Botín, anunció la inversión de un millón de libras para fomentar los préstamos sociales y llevar servicios bancarios a comunidades excluidas en el Reino Unido. Esta iniciativa se realizó a través de la entidad prestamista que nació del acuerdo entre Fair Finance y Santander UK.