El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha señalado que el Banco Central Europeo (BCE) “tiene que controlar los posibles aumentos en los tipos de interés si esos incrementos no están acompañados de alzas en las perspectivas de inflación”.
De Cos ha indicado que «en la medida que un incremento en los tipos de interés no esté acompañado de un retorno de las proyecciones de inflación a medio plazo a sus niveles previos a la pandemia, las compras del PEPP deben ajustarse para contrarrestar ese incremento en los tipos de interés».
Como gobernador del Banco de España, Hernández de Cos forma parte del Consejo de Gobierno del BCE, que es el organismo que reúne a los presidentes y gobernadores de los 19 bancos centrales nacionales de la eurozona, así como a los seis miembros pertenecientes al Comité Ejecutivo del BCE.
Este Consejo se encarga de decidir la política monetaria de la entidad financiera.
El gobernador ha explicado que el ritmo de las compras al amparo del programa PEPP está determinado por indicadores actuales y a futuro, no indicadores pasados.
El BCE se reunió la semana pasada y tomó la decisión de elevar sus compras de activos en el segundo trimestre de 2021 para hacer frente a los incrementos en la curva de tipos. Gracias a la flexibilidad del programa, esto se traduce en un aumento del volumen de compras semanales.
En relación a las previsiones económicas, De Cos ha explicado que el despliegue de las vacunas permitirá una relajación gradual de las restricciones aprobadas para hacer frente al coronavirus. Además, ayudará a recuperar la actividad económica y acelerar la recuperación.
El gobernador del Banco de España ha señalado que «en cualquier caso, la incertidumbre permanece elevada y la mayoría de ejercicios de previsión desarrollan escenarios alternativos moderados y graves dependiendo de cómo se desarrolle la crisis sanitaria».