La Oficina Nacional de Estadísticas británica (ONS) ha informado que el producto interior bruto (PIB) del Reino Unido se expandió un 0,4% entre agosto y octubre, frente a un 0,6% en los tres meses precedentes.
La ONS indicó que en el mes de octubre la economía nacional se expandió solamente un 0,1%, después de unos meses de verano más fuertes.
En los tres meses anteriores hasta el 31 de octubre, el PIB británico moderó su avance respecto al periodo entre julio y septiembre debido a la caída de las ventas de coches y al estancamiento del sector manufacturero.
Rob Kent-Smith, jefe de contabilidad de la ONS, afirmó que «el crecimiento del PIB se ha ralentizado al entrar en el otoño, después de un verano fuerte, debido al menor crecimiento de los servicios y sobre todo a la caída de la venta de coches».
Los sectores de informática y contabilidad impulsaron la economía al alza, mientras que el manufacturero «no creció en absoluto en los últimos tres meses, sobre todo por el declive del sector farmacéutico, a menudo errático», afirmó el economista.
Kent-Smith dijo que la construcción sufrió «una ligera ralentización» en el periodo estudiado, si bien mantiene un comportamiento «sólido» gracias al avance de las obras en viviendas e infraestructuras.
La ONS publica periódicamente análisis sobre la evolución del producto interior bruto, que incluyen el mostrado, con cifras por meses individuales y en bloques de tres, y otro con los datos de crecimiento por cada trimestre del año.
Esta semana, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha sentenciado que el Reino Unido tiene la capacidad de revocar de forma unilateral el artículo 50 de los tratados europeos, el que inició el proceso de su salida de la UE, el ‘Brexit’, al activarse el 29 de marzo de 2017.
La decisión de la corte con sede en Luxemburgo se ha anunciado sólo un día antes de la fecha prevista para la votación del acuerdo sobre la retirada británica en el Parlamento del Reino Unido, donde la primera ministra, Theresa May, no tiene garantizados los apoyos necesarios para sacarlo adelante.
El TJUE ha precisado en su sentencia que la revocación de la notificación en la que se informaba al Consejo Europeo de la decisión de abandonar la UE, llevada a cabo de acuerdo con los requerimientos constitucionales británicos, tendría el efecto de que el Reino Unido seguiría en la Unión Europea sin cambios en su estatus como Estado miembro.