Las ventas minoristas de Japón han subido en el pasado mes de junio más de lo esperado, gracias a un mayor gasto en combustible, electrodomésticos y cosméticos. Los analistas consideran que es una señal positiva de que los hogares están teniendo más confianza en la economía.
El aumento interanual del 1,8 por ciento en las ventas minoristas durante el mes de junio ha sido más que la estimación mediana del mercado de un beneficio del 1,6 por ciento y se ha presentado después de un incremento interanual de un 0,6 por ciento en mayo.
Las cifras de junio muestran que las ventas minoristas han crecido por ocho meses consecutivos.
El Ministerio de Comercio de Japón ha indicado en un comunicado que, sobre una base ajustada en función de la estacionalidad, las ventas minoristas ganaron un 1,5 por ciento en junio frente a una baja de un 1,7 por ciento en el mes anterior.
La economía de Japón repuntaría entre abril y junio desde la contracción que anotó el primer trimestre, poniendo fin a su racha de expansión más larga desde de la burbuja de la década de 1980.
No obstante, es poco probable que el incremento registrado en las ventas minoristas proporcione mucha comodidad para el Banco de Japón (BoJ, por su sigla en inglés), que está haciendo frente a una débil inflación y a los efectos secundarios de su programa de relajación de la política monetaria.
Shuji Tonouchi, economista senior de mercado de Mitsubishi UFJ Morgan Stanley Securities, ha señalado que “el gasto del consumidor está mejorando gradualmente, porque el mercado laboral es ajustado y la gente está recibiendo sus bonos de verano”.
Asimismo, ha agregado que “todavía me preocupa gastar porque hay muchos trabajadores a tiempo parcial. Los precios no están subiendo, por lo que el BoJ intentará cambiar su mensaje sobre la política monetaria”.