China y Estados Unidos han acordado retomar las negociaciones comerciales, después de una reunión celebrada entre los presidentes Donald Trump y Xi Jinping en Japón.
El encuentro de alto nivel era seguido con atención para ver si aliviaría las tensiones o arrastraría a las dos economías más grandes del mundo a una guerra comercial más profunda.
La disputa ya ha costado a compañías de ambos países miles de millones de dólares, ha interrumpido líneas mundiales de fabricación y suministro, y ha afectado a los mercados globales.
El informe reseñado por la agencia de noticias oficial Xinhua detalla que “la parte estadounidense dijo que no agregaría nuevos aranceles a las exportaciones chinas” y ha agregado que los negociadores de ambos países discutirían temas específicos.
Trump, quien se reunió con Xi en Osaka, en el oeste de Japón, durante una cumbre del Grupo de los 20 (G20), dijo a reporteros que había tenido una excelente reunión con el líder chino y que las conversaciones estaban “encaminadas”.
El presidente de Estados Unidos ha comentado a un grupo de periodistas que “tuvimos una muy buena reunión con el presidente Xi de China: excelente, diría excelente, tan bueno como se suponía. Discutimos muchas cosas y volvemos a la normalidad. Veremos qué sucede”.
Trump dijo antes de las conversaciones que un posible acuerdo de comercio justo sería “histórico”, pero no ofreció detalles al respecto.
Los líderes de las economías del G20 se reunieron este fin de semana con el objetivo de acelerar las reformas a la Organización Mundial del Comercio(OMC).