El Ibex 35 de la Bolsa de Madrid ha iniciado la sesión de este viernes con un descenso del 0,2%, lo que llevaba al indicador a cotizar en 7.986,2 puntos básicos, después de la euforia desatada ayer por las palabras de Mario Draghi, que llevó al selectivo madrileño a superar la cota de los 8.000 puntos, y a la espera de conocer los datos de paro en EEUU, donde los mercados permanecieron cerrados el jueves.
Entre los movimientos más significativos al comienzo de la sesión en la Plaza de la Lealtad, destacan los avances de Sacyr (+1,25%), Acciona (+1,04%), Técnicas Reunidas (+0,74%) y ACS (+0,67%).
Por contra, FCC protagonizaba la mayor caída en la apertura, con un descenso del 2,50% en el valor de sus acciones, mientras BBVA se dejaba un 1,29%, Grifols cedía un 0,68% e Inditex perdía un 0,56%.
Aparte del banco presidido por Francisco González, el resto de valores bancarios del Ibex mostraban un comportamiento dispar, puesto que, mientras el Santander y Bankinter perdían un 0,25% y un 0,2%, respectivamente, el Sabadell y el Popular subían un 0,26% y un 0,16%, respectivamente, pese a los recientes anuncios de Moody’s, y CaixaBank ganaba un 0,07%.
El resto de las principales plazas bursátiles del Viejo Continente registraban también una apertura vacilante, ya que, mientras el Dax de Francfort subía un 0,2%, Londres abría plano, y el Cac 40 parisino bajaba un 0,1%.
Asimismo, en los mercados secundarios de deuda, la prima de riesgo ofrecida a los inversores por los bonos españoles a diez años respecto a los alemanes se mantenía estable por debajo de los 300 puntos, en niveles similares a los del cierre del jueves.
En concreto, el diferencial del bono español respecto al ‘bund’ se situaba en296,70 puntos básicos, con una rentabilidad del 4,591%, frente a los 297,70 enteros del cierre de ayer.