BBVA ha informado que cumplía, a 30 de septiembre de este año, con los requisitos mínimos de capital del Banco Central Europeo (BCE) para 2016.
El BCE exige a la entidad presidida por Francisco González que mantenga un ratio de máxima calidad con las normas vigentes, conocido en el argot financiero como ‘CET1’, del 9,75% en base consolidada. BBVA contaba con un nivel del 11,7% a septiembre de este año.
La entidad considera que este nivel se sitúa «por encima de los requerimientos regulatorios, por lo que no supone la activación de ninguna restricción o limitación regulatoria en los pagos de dividendos, en la retribución variable y en los pagos de intereses a los titulares de los valores de capital de nivel 1 adicional”.
Según ha informado la entidad, este requisito mínimo incluye un colchón del 0,25% que se aplica a entidades de importancia sistémica mundial (EISM), que deberá cumplir durante 2016; al haber sido excluida de este grupo de entidades con efecto desde el 1 de enero de 2017, a partir de esta fecha no le sería de aplicación este colchón.
Sin embargo, el Banco de España ha comunicado a la entidad que está incluida en el grupo de Otras Entidades de Importancia Sistémica (OEIS), por lo que le será requerido un colchón del 0,5% en base consolidada. Este colchón contempla un periodo de implantación gradual de cuatro años, de manera que se alcance el 0,5% en 2019.
Este requisito incluye el mínimo exigido por Pilar 1 (4,5%), el requerimiento de Pilar 2 incluyendo el colchón de conservación de capital (5%); y el requerimiento derivado de su consideración como entidad financiera sistémica global (0,25%).
La decisión del BCE exige también que BBVA mantenga una ratio ‘CET 1’ del 9,5% a nivel individual, que a 30 de septiembre se situaba en el 17,4% en el caso de la entidad.