Deutsche Bank ha sorprendido al mercado con el anuncio de unas pérdidas inesperadas, valoradas en 1.153 millones de euros, antes de impuestos.
Deutsche Bank, que tiene previsto celebrar su presentación de resultados el próximo 29 de enero, ha querido anticipar este dato al mercado en vista de las reacciones que pueda tener el anuncio de sus números rojos.
El banco de origen alemán acusa estas pérdidas a los altos gastos motivados por los litigios y la reestruturación que la entidad ha llevado a cabo.
Estas cifras tienen su origen en los 528 millones de euros a los ascendieron los gastos legales, mientras que los ajuste al valor del crédito, la deuda y la financiación produjeron otros 623 millones de euros. A ellos hay que sumar los gastos de reestructuración por valor de 509 millones.
Por su parte, los ingresos de Deutsche Bank cayeron un 16%, hasta los 6.580 millones de euros, principalmente por la debilidad de su división de banca corporativa y de valores, según ha informado la entidad bancaria en un comunicado.