Los analistas Roger Turro y Janine Dow de la agencia Fitch Ratings, han afirmado que el aumento del interés de los inversores en los bancos lusos BPI y Novo Banco, es uno de los indicadores que demuestra que el sistema bancario de Portugal se está estabilizando.
En relación con Novo Banco, los especialistas de Fitch señalan que el valor que se ha informado para la compra del banco es de cuatro millones de euros, «debería ser manejable para el sistema bancario de Portugal, que según los términos del acuerdo de recapitalización, debe cubrir la diferencia entre el precio de venta y el capital inyectado en el banco».
Otra de las mejoras es el comportamiento de las acciones de los bancos cotizados. «Hace mucho tiempo que os bancos portugueses cotizan por debajo de su valor contable, pero la recuperación de las acciones de BPO, BCP y Banif en 2015 aumentó los valores de mercado, alineados con el valor en libros contables», afirman los expertos de Fitch. «Los signos positivos todavía son tímidos pero pueden ser confirmado cuando los bancos muestren los resultados de mitad de año, en julio y agosto», indican asimismo.
Las entidades chinas Anbang Insurance y Fosun International son los dos favoritos para hacerse con el portugués Novo Banco, en un operación valorada en más de 4.000 millones de euros, según informa el diario británico Financial Times.
BPI, al igual que el Banco Popular o el Banco Santander, han mostrado su interés oficial por la compra de Novo Banco, lo que les da derecho a conocer al detalle su situación económica. Sin embargo, para hacerse con Novo Banco habrá que desembolsar más de 3.000 millones de euros, y en un periodo que va a coincidir en el tiempo con el cierre de la operación de CaixaBank sobre BPI, en junio.