El grupo Banca March obtuvo un beneficio neto atribuido de 39,1 millones de euros en el primer trimestre del año.
Esta ganancia representa un 3,6% superior al mismo período del año anterior, de acuerdo con la información que ha presentado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
De acuerdo con el texto, el margen de interés subió un 28,7%, hasta los 49,4 millones de euros. En concreto, las comisiones alcanzaron los 34,8 millones, un 41,1% más.
Las comisiones han sido procedentes mayoritariamente de la gestión de fondos de inversión y SICAV y de la distribución de seguros y medios de pago.
En cuanto a Banca Privada/Banca Patrimonial, el número de clientes de más de 300.000 euros de negocio en Banca March ha crecido un 27,1% sobre la cifra del primer trimestre de 2013.
El volumen de negocios de la institución se incrementó en un 26,6%.
Por su parte, la morosidad de la entidad se ha situado en el 5,5% en marzo, ligeramente por encima del 5,4% de un año antes.
En tanto que se ha mantenido el ritmo de dotaciones alcanzando la cobertura de riesgos morosos el 78,3%.
Los recursos gestionados se incrementaron un 19,1% (12.872,6 millones) y los créditos a la clientela cayeron un 5,4% (7.141,9 millones).
Beneficios en 2013
En el año 2013, el grupo Banca March había vuelto al beneficio, periodo en el que tuvo una ganancia neta atribuida de 57,8 millones de euros, frente a los 141,8 millones de euros que perdió un año antes.
Durante una rueda de prensa, ofrecida en marzo de este año, el consejero delegado de la entidad, José Nieto, ha recordado que el resultado consolidado del grupo incluye tanto su actividad bancaria como la inversora, que realiza mediante Corporación Financiera Alba.
De acuerdo con las cuentas presentadas por el grupo, la tasa de morosidad se incrementó en 2013 hasta el 5,5%, frente al 5,3% de un año antes.
Sin embargo, Nieto ha asegurado que durante este año, el grupo financiero la reducirá de forma «importante», ya que su exposición al sector inmobiliario es «tremendamente baja».
Los recursos bancarios de los clientes se incrementaron un 2,9%, mientras que los recursos gestionados fuera de balance aumentaron el 42,6%.