NGB y los sindicatos han concluido una reunión que se ha prolongado más de 4 horas sin avances y con un calendario de negociación del ERE que los emplaza a reuniones todos los lunes.
Representantes sindicales han explicado al término del encuentro que la reunión se ha limitado a la entrega de documentación -la mayor parte en un CD, por lo que los sindicalistas aún deben revisarla-, el levantamiento del acta y la determinación de los criterios de composición de la mesa negociadora. En el exterior del edificio del Centro ITE de A Coruña y desde las 10.00 horas más de un centenar de delegados sindicales se concentraron en protesta por estas medidas.
Además, en la documentación escrita que han recibido los representantes de los trabajadores consta que el ERE afectará a un total de 2.250 personas dentro de la plantilla específica del banco -incluye la red de Novagalicia y la de EVO Banco-, a las que se suman trabajadores de la corporación industrial y de las oficinas en el extranjero, que se enfrentarán también a despidos pero con la presentación de otros expedientes específicos y siguiendo en cada caso las normas del país de destino. De este modo, el total de despidos ascenderá a los 2.508 ya anunciados.
El representante de la sección sindical de CC.OO. en el banco, Luis Mariño, ha indicado que «negociación en sí no hubo» y que no se han concretado más aspectos de cómo se aplicará el ERE. La próxima reunión ha quedado fijada para el próximo lunes a las 11.00 horas, esta vez en Santiago.
Por su parte, el responsable de CIG-Banca, Clodomiro Montero, ha indicado que los sindicatos pidieron durante el encuentro, con responsables de recursos humanos, más información y mayor concreción, así como poder contar con dos asesores en el proceso de negociación, un punto al que ha accedido el banco.
En concreto, la CIG ha reclamado datos sobre la rentabilidad de las oficinas, puesto que sospecha que se cerrarán centros de trabajo «rentables» y sobre gastos de representación, en viajes y otros conceptos de los miembros de la alta dirección.
Además, ha criticado que los responsables de NGB y sus asesores consumieron más de dos horas en redactar el acta de la reunión, con la que se da por iniciado el periodo de consultas formal del ERE. Montero ha atribuido esta demora a que conocen la posibilidad de que los sindicatos recurran el expediente si no hay acuerdo y están tratando de «dar cumplimiento a todos los formalismos». «Negociación no ha habido de ningún tipo», ha censurado.