Abanca se ha convertido en accionista de la sociedad de garantía recíproca (SGR) Iberaval, con sede en Castilla y León, para poder impulsar la financiación a las pymes.
La incorporación de Abanca como socio protector o accionista de Iberaval se ha formalizado en un acuerdo que han suscrito Pedro Novoa, el director general de la sociedad de garantía recíproca, y Santiago Novoa, el director general de la entidad bancaria gallega.
Gracias a la inclusión de Abanca en el capital social de la SGR, pasará a formar parte de las 22 entidades financieras que están integradas en el listado de socios protectores de Iberaval.
Además, el documento del acuerdo indica las alternativas de productos financieros que van a ofrecer Abanca e Iberaval de forma conjunta. Entre estas alternativas se incluye la disposición de fondos para facilitar crédito a pymes, autónomos y emprendedores en Castilla y León y en el noroeste de España.
Las dos entidades se han comprometido a formalizar con pymes, autónomos y emprendedores préstamos de hasta 600.000 euros con el propósito de impulsar inversiones, así como también para financiar necesidades de tesorería.
Desde Iberaval han explicado que “de esta manera, ambas entidades avanzan en el objetivo común y estratégico de aportar financiación al tejido productivo de un modo competitivo, acortando trámites y apuntalando aquellos proyectos viables que surjan de la iniciativa privada”.
De acuerdo con lo que ha informado Abanca en un comunicado, estos préstamos se van adaptar a plazos de devolución de entre tres y doce años, en el caso de las inversiones, y de entre uno y doce años, en los referidos a capital circulante.