Ana Botín, presidenta de Banco Santander, ha inaugurado la XII Conferencia Internacional de Banca, celebrada en la Ciudad Grupo Santander bajo el lema de “Banking on trust”. El encuentro ha reunido a más de 1.000 directivos internacionales y contado con destacadas autoridades y expertos vinculados al mundo financiero.
Durante el encuentro, los expertos han analizado la importancia de la confianza como valor fundamental para hacer frente a los desafíos sociales y económicos y para construir un mundo mejor.
Durante su intervención, la máxima ejecutiva del Santander destacó la importancia de la confianza en el sector financiero, ya que una caída de dos puntos porcentuales de este índice supone un descenso del 21,8% del crecimiento de los ingresos para los bancos, comparado con un impacto negativo del 5,8% en las empresas en general.
Ana Botín, que ocupa el cargo de presidenta del Santander desde 2014 y forma parte del grupo desde hace 30 años, aseguró que lo que le corresponde es seguir el camino de recuperar la confianza.
«Cuando asumí este puesto sabía que mi prioridad era ganar la confianza de todos nuestros ‘stakeholders’, pues en muchos casos la habíamos perdido», reconoció la ejecutiva de Banco Santander y agregó que «la confianza determina si tienes un negocio rentable o no».
También dijo estar «muy orgullosa» de su equipo, que ha conseguido adaptarse al entorno regulatorio cambiante y pasar de ser el sexto banco más grande España con solo una y pequeña división internacional, a ser el mayor banco por valor de la eurozona con más de 140 millones de clientes entre Europa y América.
Ana Botín indicó que «generar confianza es lo correcto y tiene sentido en términos comerciales, la confianza da lugar a la fidelidad, componente crítico sobre el que se basa el mejor resultado financiero posible de un banco».
En definitiva, la presidenta del Santander destacó la «enorme responsabilidad» del sector con la sociedad y la economía, indispensable para poder tener futuro. «Tenemos ese deber y lo tenemos que cumplir», apuntó, añadiendo el papel de los bancos en la inclusión financiera, el cambio climático o el feminismo.
«No solo me pronuncio por estos desafíos como algo personal, creo que todos los que tenemos el privilegio de poder hacernos oír, tenemos la obligación de hacerlo», aseveró Botín.
Respecto a la importancia de la confianza en el sistema económico, Ana Botín señaló que «los errores de unos pocos contaminaron la percepción de la opinión pública. Políticos, empresarios, banqueros… eran personas que inspiraban confianza y, de repente, lo dejaron de hacer».
Añadió que fueron todos los sectores e instituciones las que se vieron afectados y resultado de todo fue un ascenso del populismo. «Aunque el populismo es el resultado de los desafíos globales a los que nos enfrentamos, no puede ser la respuesta. Necesitamos una respuesta amplia y generosa al problema de la confianza», concluyó la ejecutiva de Banco Santander.
Cabe resaltar que Banco Santander, a nivel global, obtuvo un beneficio de 3.720 millones de euros en el tercer trimestre, un 35% menos que el año anterior, tras hacer dotaciones por 2.448 millones de euros para la filial de Reino Unido y los costes de restructuración en España y en el país anglosajón. En los primeros nueve meses del año, Santander obtuvo unos ingresos totales de 36.902 millones de euros. El banco aumentó en casi seis millones el número de clientes en los últimos doce meses y ya tiene 144 millones de clientes, más que cualquier otro banco de Europa y América.