Erste Group Bank, el banco austríaco del que CaixaBank tiene actualmente un 9,9%, generó un impacto negativo de 150 millones de euros al banco catalán en el año 2014.
Gonzalo Gortázar, consejero delegado de CaixaBank, ha hecho esta estimación a partir de las pérdidas del banco de Austria en 2014, que calcula son cercanas a los 1.600 millones de euros.
Por su parte, Isidro Fainé, el presidente de CaixaBank, ha justificado la apuesta por esta entidad bancaria debido a su importante peso en la Europa del Este.
Al consultarle por si el Banco Portugués de Inversión (BPI), participado en un 44% por CaixaBank, se propone adquirir a Novo Banco, el antiguo Espírito Santo, Gortázar ha señalado que corresponde a la entidad bancaria lusa analizar esta oportunidad. Asimismo, ha señalado que “cuando llegue el momento tendremos capacidad de decidir aquellas cosas que nos parecen adecuadas con respecto a este proceso”.
Preguntado por su participación en Repsol, Fainé ha asegurado que CaixaBank quiere permanecer en la petrolera y que no tiene previsto “ningún cambio” hasta el momento. El directivo tampoco ha aclarado si se plantea que su participación en Repsol pase a depender de Criteria.
Por otra parte, el consejero delegado de CaixaBank ha precisado que la entidad bancaria catalana aún tiene disponibles unos 4.500 millones de euros o 5.000 millones de euros en créditos fiscales.
Erste Bank es una caja de ahorros de Austria y uno de los consorcios bancarios más importantes de dicho país. Esta institución posee subsidiarias en varios países de los Balcanes, Europa Central y Oriental.