El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) permitió la fusión de Bankia y Banco Mare Nostrum (BMN) para optimizar la capacidad de recuperación de las ayudas públicas, ante un futuro proceso de desinversión.
No obstante, el Frob apenas ha logrado recuperar un total de 489 millones de euros, de los 24.069 millones de euros que ha ido inyectando de forma agregada, de acuerdo a lo que consta en las últimas cifras publicadas por el organismo de resolución.
El grupo BFA-Bankia ha recibido en la última década cerca de 22.424 millones de euros, el 7,5% de su balance, a través de inyecciones de capital por ampliación suscrita y desembolsada íntegramente por el Frob (17.959 millones de euros) e instrumentos híbridos como participaciones preferentes convertibles (4.465 millones de euros).
El Frob cobró por los intereses de las participaciones preferentes convertibles suscritas en el año 2010 unos 346 millones de euros, la única cantidad que ha logrado recuperar hasta el momento.
El organismo, que fue creado para gestionar la resolución de los bancos, mantiene una participación directa en BFA del 100% e indirecta en Bankia a través de BFA del 61,77%. Esto le permite beneficiarse de las desinversiones que vaya realizando.
En el año 2014, el Frob se deshizo de 863,8 millones de acciones de Bankia, que representaba el 7,5% del capital, al precio de 1,51 euros por acción que sumaba 1.304 millones de euros. Tres años después vendió 201,5 millones de acciones, representativas del 7% del capital a un precio de 4,06 euros por acción y por un total de 818 millones de euros.
Esta segunda desinversión se llevó a cabo después de la reducción de capital a través de la reducción de nominal y posterior agrupación de acciones en circulación, proceso conocido como ‘contrasplit’, lo que supuso elevar cuatro veces el precio por acción. Por lo tanto, el precio equivalente al de la primera desinversión es de 1,02 euros por título.