Banco Santander México ha firmado un acuerdo la pasada semana con la Corporación Financiera Internacional (IFC), con el objetivo de potenciar prácticas de construcción sostenible.
La filial mexicana de Banco Santander apoyará de este modo a sus clientes en el país azteca respecto a la certificación de Excelencia en el Diseño para una Mayor Eficiencia (EDGE), una iniciativa de IFC que permite acreditar una edificación o desarrollo como una construcción sostenible. La certificación EDGE proporciona una diferencia competitiva en el mercado, el recorte de los costes operativos y de mantenimiento, aumenta el potencial de venta del inmueble, proporciona una mayor plusvalía, y el reconocimiento como una empresa constructora responsable.
Esta alianza entre Santander México y Corporación Financiera Internacional brindará a los desarrolladores el apoyo de Banco Santander mediante soluciones de alto valor y el acceso a financiación sostenible, ayudando así a la transición hacia una economía verde de las empresas de la construcción en México.
Para Javier Rodríguez Ardila, responsable de Green Finance en Santander México, “Esta alianza con IFC es el primer paso para impulsar una transición de gran calado en el sector de la construcción hacia una economía verde, asesorado con la experiencia global de este organismo miembro del Grupo Banco Mundial, y que confirma el liderazgo de Santander en financiamiento sostenible en México. Tenemos la meta de que, durante 2023, un total de 20 desarrollos que involucran más de 300,000 metros cuadrados de construcción, se certifiquen con EDGE como construcciones verdes, lo que no tiene precedente”.
Juan Gonzalo Flores, Country Manager de IFC en México, afirmó por su parte que “Este acuerdo marca un hito significativo en nuestros esfuerzos para promover el desarrollo sostenible y combatir el cambio climático en México. El ámbito de la construcción sostenible es fundamental. Hasta la fecha, se han certificado 4.8 millones de metros cuadrados en México, posicionando a EDGE como una opción importante entre los desarrolladores del país.”
Además, la certificación ayuda a facilitar el acceso a incentivos, subsidios o financiación verde a los desarrolladores. Según la ONU, en 2030 habrá 80 billones de nuevos metros cuadrados construidos, lo que supone el 60% del área construida actualmente. IFC cree que esto supone una oportunidad de inversión de 4,2 billones de dólares en edificios verdes para Latinoamérica.
Banco Santander impulsa con esta alianza su compromiso a favor de la transición hacia una economía verde de sus clientes, y prosigue con su objetivo de movilizar más de 120.000 millones de euros en financiación verde entre 2019 y 2025.