Portugal otorgará hasta 450 millones de euros a la inyección de capital de 791,7 millones de euros que Novo Banco ha solicitado al Fondo de Resolución, después de anunciar unas pérdidas de 1.395 millones de euros en 2017.
El Fondo de Resolución ha explicado en un comunicado que para llevar a cabo esta inyección utilizará los recursos financieros disponibles que proceden de las contribuciones pagadas directa o indirectamente por el sector bancario de Portugal.
Estos recursos se van a complementar con un préstamo que entregará el Estado, de acuerdo a los términos acordados en octubre de 2017.
En este sentido, el Fondo ha agregado que «el importe concreto de este préstamo aún no se ha comprobado, pero se estima que no supere los 450 millones de euros, quedando por debajo del límite anual de 850 millones de euros».
El Fondo de Resolución ha desembolsado unos 4.900 millones de euros en el apoyo financiero de la resolución de Banco Espírito Santo y este nuevo pago cumple con los contratos relacionados con la venta de Novo Banco, donde el Estado posee una participación del 25%.
Novo Banco, creado en agosto de 2014 con los activos saneados del quebrado Banco Espírito Santo (BES), solicitó la semana pasada al Fondo de Resolución de Portugal una inyección de capital de 791,7 millones de euros después de registrar pérdidas récord de 1.395 millones de euros.
El banco ha indicado que «el 31 de diciembre de 2017, el mecanismo fue activado conduciendo al registro de una compensación de 791,7 millones de euros, con el objetivo de que el banco se mantenga como una institución financieramente sólida y bien capitalizada, con unos óptimos ratios de capital y niveles de rentabilidad».
Al cierre de 2017, Novo Banco registró pérdidas récord de 1.395 millones de euros, un 77% más en comparación a los ‘números rojos’ del año anterior, que atribuye al aumento de las provisiones para cubrir pérdidas futuras. Esta partida se elevó un 49,6%, hasta ubicarse en 2.057 millones de euros.