Este vehículo ha sido construido en diez semanas, utilizando una estructura flexible y escalable para incorporar un amplio abanico de inversores. Para ello, han contado con el asesoramiento legal de Garrigue
WiZink ha completado la primera operación de titulización de tarjetas españolas, por la que ha colocado entre inversores institucionales internacionales bonos por 200 millones de euros.