El ajuste de la red de oficinas bancarias en España ha reducido la densidad de las mismas hasta poco más de 600 sucursales por cada millón de habitantes.
La red bancaria constituye el principal canal de distribución en el sector de seguros, si bien su participación sobre la facturación total por primas se redujo moderadamente en 2012, hasta ubicarse en el 38,8%, según un informe de la consultora DBK.