El Banco de Japón (BoJ) ha decidido acelerar su plan para ampliar la base monetaria del país a un ritmo anual de 80 billones de yenes anuales (572.000 millones de euros) en vez de los entre 60 y 70 billones de yenes (429.176 y 500.706 millones de euros) anteriormente previstos, según informó la institución.