Después de que las autoridades argelinas anunciaran la suspensión del tratado como represalia al "injustificable" apoyo del Gobierno de Pedro Sánchez al plan de autonomía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental, en rueda de prensa en Bruselas, el portavoz principal de la Comisión Europea, Eric Mamer, ha instado a Argel a "dar marcha atrás" a la decisión que ha calificado de "extremadamente preocupante".