La gran banca española, Santander, BBVA y Caixabank, recortó el crédito a la clientela local entre un 3,5% y un 7,6% en los nueve primeros meses del año en comparación con el mismo periodo del año anterior, debido fundamentalmente al proceso de desendeudamiento de empresas y hogares.
El optimismo de los directores financieros españoles respecto a los resultados de sus compañías en 2013 ha aumentado en 11,5 puntos respecto al año pasado. El 58,5% de los mismos espera una mejoría del comportamiento de sus entidades, frente al 47% del año pasado, según ha informado la Asociación Española de Financieros de Empresa (Asset).
La banca española prevé que mejoren las condiciones de acceso a los mercados mayoristas y que los minoristas se mantengan sin cambios. Además, esperan que los criterios de préstamo a los hogares se relajen, según la Encuesta sobre préstamos bancarios en España recogida en el Boletín del BdE del mes de julio.
La filial de concesiones de OHL ha firmado un contrato de crédito, denominado en pesos mexicanos, por importe equivalente a 300 millones de euros, según ha informado este jueves la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Bankinter y Suraval han suscrito un acuerdo con el que se pretende responder al principal problema de las pymes a la hora de acceder al crédito, que es la necesidad de ofrecer garantías suficientes a las entidades de crédito.
El crédito concedido por la banca española en el pasado mayo se ha reducido un 5,4% con respecto al mismo mes de 2012, hasta contabilizar 770.660 millones. Los depósitos, sin embargo, se han incrementado un 10,3%, alcanzando los 706.343 millones de euros.
Ángel Cano, consejero delegado de BBVA, que ha llegado el momento en el que las entidades sanas deben comprometerse con la sociedad española y contribuir de manera activa a la revitalización del crédito "de una manera equilibrada y responsable".
Deloitte, como administrador concursal de Pescanova, firma este viernes el crédito urgente por valor de 55 millones de euros que la empresa pesquera gallega necesita para seguir funcionando, tras dos meses de negociaciones.