China ha recortado el dato del crecimiento de su economía en 2017 en una décima, hasta el 6,8%, según ha señalado la Oficina Nacional de Estadística del país asiático.
Por años, la relación entre China y Latinoamérica se limitó a la retórica de la amistad entre Pekín y los no alineados, o también al apoyo, con palabras más que con hechos, a movimientos revolucionarios en la región.