Samsung Electronics ha ganado 9,27 billones de wones (6.976 millones de euros) en el tercer trimestre de 2020, un 51,7% más respecto al mismo periodo del año anterior, gracias a la fuerte demanda de smartphones.
La compañía ha informado en un comunicado que entre los meses de julio y septiembre, las ventas alcanzaron los 66,96 billones de wones (50.394 millones de euros), lo que supone un 8% más que en el tercer trimestre de 2019, mientras que el beneficio operativo de Samsung se ha elevado en torno al 58,7%, hasta los 12,35 billones de wones (9.295 millones de euros).
El gigante tecnológico surcoreano ha explicado que «a pesar de la pandemia de Covid-19, la reapertura de economías clave generó un aumento significativo en la demanda de los consumidores» y ha destacado el aumento en la demanda no sólo de teléfonos inteligentes, sino también de los productos electrónicos de consumo.
Al final de tercer trimestre, la rentabilidad financiera (RoE) de Samsung se ha situado en el 14%, frente al 10% del tercer trimestre de 2019, mientras que el margen de Ebitda ha sido del 29%, una cifra que se ubica por encima del 23% del año pasado.
Por otro lado, la compañía ha informado que la inversión de capital ha alcanzado los 8,4 billones de wones (6.319 millones de euros), incluyendo 6,6 billones de wones (4.965 millones de euros) en semiconductores y 1,5 billones (1.128 millones de euros) en el negocio de pantallas.
Hasta el mes de septiembre, Samsung había invertido un total de 25,5 billones de wones (19.179 millones de euros).
Se tiene previsto que para el conjunto del ejercicio en curso el gasto de capital de Samsung alcance los 35,2 billones de wones (26.481millones de euros).
De cara al próximo año 2021, Samsung ha manifestado su confianza en una recuperación de la demanda global general, aunque ha indicado que va a seguir habiendo incertidumbre ante la posibilidad de nuevas olas epidémicas.