Viajar en verano con un seguro de viaje que cubra las principales incidencias durante el trayecto es una tendencia que se está incrementando entre los españoles, según un estudio realizado por Mapfre entre sus clientes, con el que ha identificado un incremento del 31 por ciento en las ventas de seguros de viaje entre enero y junio de 2014, respecto al mismo periodo del año anterior.
Los viajes de verano suelen ser los principales motores de la venta de este tipo de productos de asistencia en viaje, ya que según Mapfre un 42 por ciento de los seguros de viaje se contratan entre junio y agosto. En total, la aseguradora contabiliza unas 26.000 pólizas vendidas, además de los viajes de empresa y los productos vendidos por las agencias de viaje.
Los viajes internacionales siguen siendo el principal motivo para contratar pólizas de este tipo, y los destinos europeos y del Mediterráneo son los que mayor demanda tienen, ya que un tercio de los seguros contratados son para estos destinos.
El resto de seguros realizados por Mapfre han sido para viajes en distintas partes del mundo, y un 4 por ciento para viajes dentro de España, una proporción que va en aumento, según la empresa.
Los viajeros que utilizan su seguro de viaje suelen hacerlo para recibir asistencia sanitaria, según datos de Mapfre respecto a sus propios clientes, según los cuales dos de cada tres usos de la póliza son para cobertura médica. Un 20 por ciento de los clientes de seguros requirieron la idemnización por cancelación del viaje, y un 9 por ciento para solucionar problemas de pérdida de equipaje o retraso en el vuelo.