S&P Global ha ratificado la nota de solvencia a largo plazo de Mapfre en ‘BBB+’ con perspectiva ‘positiva’. Esto supone un grado de inversión de calidad aceptable y la posible mejora del rating en un periodo de 12 meses.
La agencia de calificación ha subrayado que Mapfre tiene una marca «reconocida» en España y en mercados seleccionados de América Latina, así como un perfil diversificado por línea de negocios y geografía.
S&P ha señalado en un comunicado que «refleja nuestra visión de la sólida posición de capital consolidado de Mapfre; estimamos que el índice de Solvencia II del grupo se estabilizará en torno al 200%».
Para los analistas de la agencia, Mapfre va a generar ganancias «suficientes» para compensar el aumento en los requisitos de capital derivados del crecimiento orgánico y de las pequeñas adquisiciones.
Sin embargo, ha admitido que las fortalezas comerciales de Mapfre se ven mitigadas por la limitada contribución de los países donde el grupo se ha expandido en los últimos años, tales como Turquía o Italia.
En relación a la perspectiva, S&P Global podría elevar la calificación en los próximos 12 meses si llegara a observar que el grupo mejora de forma sostenida su desempeño en los países donde recientemente se ha expandido o ha registrado un desempeño inferior, y si la rentabilidad en países como España, Brasil y su negocio de reaseguros se mantiene «resistente».
En cambio, S&P revisaría la perspectiva a ‘estable’ si la adecuación de capital de Mapfre llegara a caer de forma inesperada y materialmente por debajo de los umbrales establecidos en sus parámetros como adecuados para la calificación que tiene.
Para finalizar, la agencia de calificación ha indicado en un comunicado que derivaría en un empeoramiento de la perspectiva el hecho de que las ganancias de Mapfre se normalizan en niveles significativamente por debajo de sus previsiones, entre otros aspectos.