Orange España ha facturado 1.188 millones de euros en el primer trimestre de 2021, lo que supone un 7,4% menos que en el mismo periodo del año anterior, debido a la competencia que existe en el mercado.
Durante la presentación de los resultados financieros, el grupo ha mostrado también una caída de mayor calado en el sector minorista donde los ingresos han sido un 10,2% menores y han pasado de 910 millones de euros en el mismo periodo de 2020 a 818 millones de euros en los últimos tres meses.
Orange ha agregado que este descenso de facturación se debe también a la estrategia de cambio de precios del segundo semestre del año.
Por otro lado, el negocio mayorista ha mostrado una mayor resistencia, aunque se ha dejado un 2,3% de ingresos para obtener una facturación de 215 millones de euros.
Entre los distintos tipos de servicio, los convergentes (banda ancha y móvil) han sido los que más ingresos han reportado con 469 millones de euros, con una caída interanual del 9,4%. Le siguen los servicios móviles por los que Orange España ha ingresado 231 millones de euros, un 13,6% menos, y los servicios fijos, que han reportado 116 millones de euros para el grupo, un 6,7% menos.
En tendencias positivas, la empresa ha destacado la venta de equipamiento que ha repuntado un 10% hasta los 155 millones de euros.
Stéphane Ricart, el consejero delegado de Orange a nivel global, ha explicado en el comunicado de los resultados que el grupo ha crecido en Europa si se excluye a España, «donde la recuperación continúa siendo una prioridad».
Sin embargo, a pesar de la caída de los ingresos, el grupo ha indicado que el reposicionamiento de las ofertas se ha traducido en una operativa comercial positiva en España por tercer trimestre consecutivo. En concreto, Orange ha registrado 10.000 nuevos usuarios en servicios convergentes, 49.000 en fibra hasta el hogar y 24.000 en móviles excluyendo las líneas M2M.