Embarcarse en el proceso de firmar una hipoteca es una de las decisiones más importantes de una vida. Si quieres ser propietario de un inmueble, comparar hipotecas entre distintas entidades bancarias puede llegar a ser la diferencia entre un tipo de crédito más holgado y permisivo y otro más estricto. Sea cual sea el tipo de hipoteca por la que te decidas, existen unos pasos comunes que es necesario seguir para la obtención de una hipoteca:
1. Cumplir los requisitos para su solicitud
Los bancos pretenderán conocer tu situación financiera a fondo con el fin de conocer si puedes solicitar una hipoteca o no. Además, deberás disponer de unos ahorros de, al menos, un 30% del inmueble. Por una parte, el 20% será destinado al propio inmueble, ya que la entidad bancaria, de manera general, aportará un 80% como máximo de su valor de compra. Además, los trámites, la obtención de la documentación, y los gastos de formalización del préstamo hipotecario supondrán el otro 10% del valor del inmueble.
Por otro lado, las entidades bancarias confiarán en las personas que pueden demostrar que puede hacer frente al gasto que supone una hipoteca. Esto quiere decir que primará a las personas con un contrato estable e indefinido, presumiblemente que mantengan su trabajo en la misma empresa durante un periodo que delimitará el banco, aunque no quiere decir que no conceda hipotecas a autónomos u otras personas con una situación laboral diferente.
2. Compara ofertas de diferentes hipotecas
Dentro de una misma entidad bancaria existen diferentes préstamos hipotecarios con condiciones totalmente distintas y, dependiendo de cada banco, estas pueden variar también. En este caso, entidades como ComparadorHipotecas puede ayudarte a, por ejemplo, aconsejarte entre el tipo de hipoteca fija, variable o mixta. De esta manera, este tipo de empresas te ayudarán y asesorarán teniendo en cuenta tu caso en concreto y valorarán cuál es el camino a tomar en función de tus datos actuales y proyecciones de futuro.
3. Negociar con el banco elegido
Una vez escogida la entidad bancaria con la que quieres embaucarte en el proceso hipotecario, será necesaria la negociación presencial de los términos y las condiciones del préstamo. Este proceso puede ser también aconsejado por el comparador de hipotecas que te guiará, si no tienes un conocimiento extenso, con el fin de que puedas conseguir el mejor pacto posible.
4. Reunir y entregar la información necesaria
Una vez conocidos los términos y acordado ese principio de comunicación entre la entidad bancaria y la persona solicitante del préstamo hipotecario, esta última deberá acreditar su situación financiera con diferentes documentos como el contrato laboral, las escrituras de cada propiedad que posea, los recibos de pago de los préstamos que haya solicitado o los que estén aún en vigor…
5. Estudio y aprobación del banco
Una vez conozca tu situación a través de la documentación previamente entregada, la entidad bancaria estudiará el caso y, si lo aprueba, deberá entregar varios documentos mínimo 10 días antes de la firma de la hipoteca: la Ficha Europea de Información Normalizada, la Ficha de Advertencias Estandarizadas, el contrato…
6. Provisión de fondos
El último paso antes de firmar la hipoteca será adelantar una suma de dinero que se utilizará para pagar los gastos de formalización de las escrituras de la hipoteca y de los impuestos correspondientes. Serán unos trámites de los que se encargue la entidad bancaria que, normalmente, ascenderán a un total del 10% del precio total de la vivienda.