La empresa constructora ACS se ha puesto en marcha para refinanciar la deuda de Urbaser. Una filial dedicada a la recogida de basuras, que ha tenido graves problemas de liquidez por el impago de los ayuntamientos.
Recientemente, la compañía presidida por Florentino Pérez ha emitido bonos convertibles con acciones de Iberdrola, y ha lanzado pagarés desde Irlanda.
Especialistas financieros consideran que ACS ha reabierto las negociaciones con sus bancos acreedores para alargar el vencimiento de un crédito sindicado de 500 millones de euros, que ya fue renovado en mayo de 2012.
Después de la firma del acuerdo, se determinó que la nueva fecha de vencimiento sea el próximo 28 de noviembre.
Las dificultades por las que atravesaba Urbaser por los impagos de las Administraciones llevaron a esta filial a una situación muy complicada. La empresa de recolección de basura se vio en la necesidad de financiar a sus propios contratistas.
Urbaser tuvo que dar créditos a los ayuntamientos de Candelaria, Cona del Río, Turre y Chiclana, y previamente había tenido que asistir a los municipios de Jerez, Villanueva del Pardillo, Lebrija, Almonte, Alcalá de Henares, Alcalá del Río, Mora, Lantejuela, Fuengirola, Camarma de Esteruelas, Algeciras, el Complejo Medioambiental Sur de Europa y la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol.
La constructora ha vuelto a recuperar la confianza de las entidades financieras tras reducir sensiblemente su endeudamiento, y Urbaser ha retornado a la normalidad.
En 2012, últimas cuentas publicadas, la subsidiaria de ACS cobró atrasos por cerca de 600 millones, lo que le permitió pasar de tener un circulante negativo de 152 millones a uno positivo de 248. El beneficio neto de la empresa Urbaser disminuyó desde los 140 millones de 2011 a los apenas 10,1 millones de 2012.
La empresa ha decidido dejar de ofrecer sus servicios en las comunidades autónomas y municipios donde ha tenido serios problemas para cobrar sus facturas.
En enero, la Alcaldía de Santiago anunció la suspensión de contratos con las empresas Esemsa y Urbaser, porque dijeron que las dos empresas han mostrado tener deficiencias en el servicio de recolección de residuos sólidos del municipio de Santiago.
La institución envió una carta a ambas empresas, señalando que en vista de que el incumplimiento del contrato ha traído como consecuencia una deficiencia en el servicio, en perjuicio de la comunidad, el Ayuntamiento de Santiago ha tomado la decisión de suspender su participación en el proceso de recolección de residuos sólidos.