Mexicana de Aviación, que llegó a ser una de las dos mayores líneas aéreas de México, y sus filiales Click y Link, ha sido declarada en quiebra, lo que abre el camino para desmantelar a la emblemática empresa.
La decisión tomada por las autoridades la semana pasada pone fin a un largo proceso. La aerolínea presentaba una deuda estimada en 1.000 millones de dólares (724.7 millones de euros) y desde hace cuatro años, una treintena de inversionistas quisieron rescatar a la compañía, pero ninguno de ellos logró acreditar los recursos para la capitalización de la aerolínea.
La Secretaría de Comunicaciones y la del Trabajo han comunicado que la justicia aprobó un convenio para proceder con la quiebra presentada por los acreedores mayoritarios de Grupo Mexicana: el banco local Banorte, el estatal banco de fomento Bancomext y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
A la fecha no se han revelado los detalles del convenio con los acreedores de Mexicana de Aviación.
Ricardo del Valle, secretario general de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación, ha comentado que las organizaciones sindicales van a organizar asambleas para informar a los 8.500 trabajadores esta decisión. Del Valle ha comentado “hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance, y seguiremos trabajando. Primero conoceremos como viene la resolución y después veremos la posibilidad de impugnar la decisión de la juez”.
Por otra parte, asegura que están convocados por la Secretaria del Trabajo y Previsión Social, para demandar que se garanticen los derechos de los trabajadores.
La base de mantenimiento de aviones Mexicana MRO, con un valor estimado de entre 80 y 100 millones de dólares (72.4 millones de euros), ha quedado fuera de la declaratoria de quiebra y va a continuar con su funcionamiento para llevarla a un proceso de reestructuración.
El comunicado detalla que “los recursos que se obtengan por el MRO deben destinarse, por conducto de un fideicomiso, al apoyo económico de los cerca de ocho mil trabajadores y 600 jubilados de las cuatro empresas del Grupo Mexicana”.
Si un comité integrado en parte por los trabajadores de la empresa decide vender la MRO, tendrá que concretarse por medio de una subasta pública internacional. Otros activos de la línea aérea, como nueve aviones que había dado en garantía a Bancomext, podrán ser vendidos.