La traducción técnica requiere una formación específica en el campo en el que se va a trabajar. Este alto grado de especialización nos lleva a plantearnos qué formación que debe tener el traductor técnico.
Hay quienes opinan que, en la traducción técnica, el traductor formado en traducción y no habiendo cursado además otra carrera técnica, no tiene los conocimientos necesarios ni similares a los que puede tener un técnico de la materia. Incluso hay quien piensa que sólo deberían dedicarse a la traducción técnica los propios científicos.
Por el contrario, también hay quien opina que un científico sin la debida formación en traducción, no posee las herramientas y conocimientos necesarios para poder realizar una traducción (sea del carácter que sea).
En la actualidad, las universidades de traducción forman con asignaturas específicas a sus traductores. De este modo, el traductor recibirá, durante unos meses, formación de traducción técnica. Esto le permite tener conocimientos suficientes para tener una visión global de la traducción técnica, pero no es suficiente como para considerarse un traductor técnico.
Resulta evidente que, para tener una formación completa en traducción técnica, se deben dar los ingredientes de formación en traducción más formación en el campo técnico al que se quiera dedicar el estudiante.
Esta formación técnica debe incluir un interés verdadero en la materia que invite a indagar, a leer, a investigar en la materia, ya que, sin ese interés, será una tarea ardua y seguramente no fructífera el intentar formase en un campo técnico.
De igual modo, aquel científico que desee trabajar en la traducción técnica, debe tener una pasión genuina por los idiomas y la traducción, ya que de otro modo nunca conseguirá su meta.