Acciona ha iniciado la instalación de la primera planta solar fotovoltaica flotante conectada a la red eléctrica en España, concretamente en Extremadura, un proyecto demostrativo para estudiar soluciones técnicas para la instalación de paneles solares sobre la superficie de lagos o embalses.
La planta, de 1,125 megavatios pico (MWp) de potencia, estará finalizada a mediados de año y se sitúa en la orilla sur del embalse de Sierra Brava, en Zorita (Cáceres), ha informado la compañía este martes.
Sierra Brava es un embalse artificial de 1.650 hectáreas de superficie, construido en 1996 y alimentado por las aguas del arroyo Pizarroso.
Tiene 12.000 metros cuadrados de superficie y la planta solar fotovoltaica flotante ocupará en torno al 0,07 %.
La directora de Innovación de la división de Energía de Acciona, Belén Linares, ha dicho que esta iniciativa va a permitir extraer conocimientos para desarrollar plantas flotantes en zonas donde esta opción tecnológica resulte más adecuada que las convencionales sobre tierra firme.
En la planta flotante de Sierra Brava, se estudiarán diversos tipos de tecnologías de paneles solares y de configuraciones en cuanto a inclinación, colocación y orientación, entre otros parámetros, así como diversas estructuras de flotación.
La instalación constará de cinco sistemas flotantes adyacentes -suministrados por las compañías Amilibia Marinas, Isigenere y Stansol- anclados al fondo y unidos a la orilla por un pantalán de acceso, con capacidad cada uno para 600 módulos fotovoltaicos.
Cada sistema estará conectado a tres inversores de 60 kilovatios (Kw), que convertirán la corriente continua generada por los paneles en corriente alterna.
A su vez, cada inversor estará conectado a un pequeño centro de transformación que elevará la corriente en baja tensión (400 voltios -V-) a media tensión (22 kilovoltios -Kv-), desde donde será conducida por una línea soterrada de 1,4 kilómetros hasta el punto de conexión a la red.
La planta contará con un pequeño centro para albergar servicios de operación y mantenimiento y control de la instalación, así como una estación meteorológica, que estará conectada por fibra óptica con la caseta de control, para medir parámetros de radiación solar, temperatura, velocidad y dirección del viento, humedad relativa, presión atmosférica y precipitaciones.
La energía fotovoltaica flotante se ha convertido en una opción empleada en diversas regiones del mundo con escasez de terreno disponible.