Pernod Ricard ha ganado un 76% menos en el conjunto de su año fiscal, finalizado en junio.
El fabricante de bebidas alcohólicas ha obtenido un beneficio neto de 350 millones de euros debido al impacto de la pandemia del coronavirus. La facturación en el conjunto de los 12 meses fiscales ha descendido un 8%, hasta los 8.448 millones de euros.
Las ventas orgánicas han caído un 9,5% y la empresa ha explicado que en el periodo se ha reportado un impacto positivo del tipo de cambio por la apreciación del dólar frente al euro.
Por áreas geográficas, Pernod Ricard ha facturado 2.532 millones de euros en Europa, un 5% menos, mientras que en América se ha contraído en torno al 4%, hasta 2.449 millones de euros. En Asia y el resto del mundo los ingresos de la destilería han alcanzado los 3.467 millones de euros, un 13% menos.
Los costes logísticos del fabricante francés de bebidas alcohólicas han registrado una caída del 4,9% en el conjunto del ejercicio, hasta situarse en 3.362 millones de euros, mientras que la partida de publicidad y promoción ha alcanzado los 1.327 millones de euros, lo que supone un 12% menos.
Por otro lado, los gastos de estructura han experimentado una contracción del 4%, hasta alcanzar los 1.499 millones de euros.
Pernod Ricard ha informado que, al cierre del año fiscal, la deuda neta ha crecido en 1.804 millones de euros, hasta los 8.424 millones de euros.
La compañía ha explicado en un comunicado que este aumento es consecuencia de un menor flujo de caja, al mayor gasto en fusiones y adquisiciones y al gasto en el programa de recompra de acciones.
Pernod Ricard cuenta con 85 filiales directas repartidas por el mundo, lo que constituye una auténtica ventaja competitiva, que les permite tomar decisiones lo más cerca posible de los consumidores y de las marcas. Cada entidad está dirigida como un centro de beneficios dotado de una amplia autonomía.