El Gobierno transformará el gravamen temporal sobre la banca en un impuesto y gravará el líquido de los vapeadores, aunque parece que el tributo sobre las energéticas desaparecerá, según las enmiendas registradas por el PSOE en la ley sobre el tipo mínimo de las multinacionales.
Según las enmiendas del grupo socialista, el nuevo impuesto bancario seguirá gravando el margen de intereses y comisiones, permitiendo una deducción del 25% en el impuesto de sociedades y una deducción extraordinaria si la rentabilidad de la entidad cae por debajo de un umbral.
El PSOE justifica en su enmienda la continuidad de un impuesto inicialmente temporal, argumentando que la banca ha seguido aumentando sus beneficios. Sin embargo, establece una vigencia limitada de tres años desde 2024, ante la posibilidad de que futuras situaciones pongan en riesgo la estabilidad financiera.
Entre las enmiendas del PSOE no se incluye la que convertiría en permanente el gravamen sobre las energéticas, por lo que es probable que desaparezca a final de año debido a la negativa de Junts a apoyarlo. Fuentes parlamentarias indican que, si se lograra un acuerdo político, el texto podría introducirse como enmienda transaccional en las próximas semanas.
Por lo que respecta a los vapeadores, la enmienda establece que el líquido para cigarrillos electrónicos que contenga menos de 15 miligramos de nicotina por mililitro de producto pagará 0,15 euros por mililitro y 0,20 euros si la cantidad de nicotina es mayor. Las bolsas de nicotina y otros productos de nicotina pagarán 0,10 euros por gramo.
El PSOE explica que se ha decidido crear este impuesto como consecuencia del incremento de la comercialización de los cigarrillos electrónicos y la importante proporción de adolescentes y adultos jóvenes que los usan, a la espera de la directiva europea que armonice la fiscalidad de estos productos.
Asimismo se suben los impuestos al tabaco desde el 1 de enero de 2025, dado que se trata de una «fuente relevante de ingresos para las haciendas territoriales» y porque es un instrumento al servicio de la política sanitaria, según justifica la enmienda socialista, que subraya que subir el precio del tabaco desincentiva su consumo. El IRPF ahorro sube al 29 % para rentas altas.
Aumentar el IRPF para rentas altas
El PSOE también propone aumentar la tributación del ahorro para rentas altas, de manera que las rentas que superen los 300.000 euros pagarán por este tramo un IRPF del 29 %, un punto más que ahora (0,5 puntos de la escala estatal y 0,5 puntos de la autonómica).
Asimismo, plantea neutralizar el impacto recaudatorio de la anulación por parte del Tribunal Constitucional de las reformas del impuesto de sociedades del PP a través de la limitación de la compensación de bases imponibles negativas de las grandes empresas y las deducciones por doble imposición, así como con la reversión los deterioros de valor.
También se extiende durante dos años (2024 y 2025) la norma que solo permite compensar la mitad de las bases imponibles de las sociedades a los grupos de los que forman parte.
Por el contrario, plantea una bajada del impuesto de sociedades para las empresas que facturan menos de un millón de euros, que pagarán un 17 % por los primeros 50.000 euros de base imponible y el 20 % por el resto, en lugar del 23 % actual. Sube el impuesto del gasóleo.
Subida del impuesto de hidrocarburos para el gasóleo
El PSOE propone equiparar la fiscalidad del diésel y la gasolina con la subida del impuesto de hidrocarburos para el gasóleo (excepto el profesional), que pasará de 0,379 euros el litro a 0,47269 euros el litro, salvo en casos excepcionales en que durante dos meses consecutivos el precio de venta supere los dos euros el litro (cuando será de 0,422).
¿Dejarán de estar exentos de IVA los alquileres de corta duración?
Otra enmienda establece que el Gobierno impulsará la modificación de la directiva del IVA para permitir a los Estados gravar los alquileres de corta duración, inferior a 30 días, en las zonas donde estos alojamientos dificultan el acceso a la vivienda o implican saturación turística.
Esto implicaría que estos alquileres de corta duración dejarían de estar exentos de IVA y pasarían a tributar igual que los alojamientos hoteleros.