Los últimos datos publicados de NIQ aseguran que las ventas totales de bienes de consumo en las cestas de la compra españolas en julio se elevaron un 11,3% en valor respecto al mismo periodo del año precedente, mientras que el volumen experimentó un ligero ascenso del 0,8%, al tiempo que los precios registraron una subida del 10,4%.
En concreto, la alimentación supuso un mes más el mayor desembolso para los hogares españoles, con un incremento en las ventas en valor del 13%, aunque también fue la categoría que mayor crecimiento de la demanda experimenta, con un aumento del 2,2% de las ventas en volumen.
Sin embargo, tanto droguería y perfumería, como bebidas registraron subidas más moderadas en las ventas en valor de un 10% y un 7,2%, respectivamente. Mientras que bebidas recorta su demanda en un 1,4%, droguería y perfumería incrementa sus ventas en volumen en un 1,8%.
Por lo que respecta a los precios, siguen registrando variaciones al alza frente a un año antes. Así, la alimentación incrementó su precio en un 10,5%, mientras que bebidas lo hizo en un 8,7% y droguería y perfumería fue un 8% superior, respecto a julio de 2022.
El comportamiento de julio en cuanto a los productos más inflacionistas se mantiene la tendencia, por lo que el azúcar continúa siendo el que más sube su precio respecto a un año antes, con un incremento del 34,6%, seguido de la parafarmacia de gran consumo, un 25,3% más; el arroz, un 24,1% más; las verduras congeladas, que se incrementan un 20,8%.
Mientras que la horchata, un producto típico del verano, registró una subida del 19,7%, seguida de los alimentos infantiles (+18,2%) o la protección solar, que registra un alza del 15,4%, el mismo porcentaje que experimenta el aceite que vuelve a entrar en las categorías que alcanzan mayor inflación.
Por su parte, los productos que registran menores crecimientos en su precio promedio frente a julio de 2022, son el café que sube un 3,5%, los detergentes de la ropa, con un incremento del 2,9%; los platos preparados refrigerados, un 2,6% más; los frutos secos, un 1,7% más o el maquillaje, un 1,3% más.
El informe muestra que el tratamiento facial, además de bajar su precio sensiblemente, es el que más sube su demanda, con un 16,6% más en las ventas en volumen, debido al verano.
Por otro lado, a cierre de julio, la marca de distribuidor sigue al alza tras registrar un crecimiento del 16,7%, frente a la subida del 7,5% de las marcas de fabricante, mientras que las ventas en volumen se elevan en un 4,7% para la marca blanca, mientras que cae un 3,1% las de fabricante.