A través del Decreto 1842, que permite establecer tasas de interés fijas para créditos de vivienda de interés social, el sistema financiero de Bolivia ha logrado colocar 254 millones de dólares (208 millones de euros) en nuevos préstamos para viviendas.
Este monto ha permitido beneficiar a 7.000 familias que han adquirido una vivienda propia. Además, también se ha logrado renegociar créditos por aproximadamente 115 millones (94 millones de euros), los cuales favorecen a más de 3.990 ciudadanos.
Mario Guillén, viceministro de Pensiones y Servicios Financieros de Bolivia, indicó que el 44 % de las personas que accedieron a créditos para la compra de vivienda compró propiedades con un valor menor a 73.000 dólares (59.800 euros), el 41 % adquirió propiedades con un costo entre 73.000 y 109.000 dólares (59.800 y 89.348 euros); y el 14 % corresponde a la compra de propiedades por un valor de entre 109.000 y 132.000 dólares (89.348 y 108.198 euros).
“Estos datos demuestran que la gente de menos recursos está accediendo a tener una vivienda. Los solicitantes adquirieron una propiedad menor a 73.000 dólares (59.800 euros), el 49 por ciento compró una casa, el 20 por ciento un departamento y 18 por ciento lo utilizó para construcción de vivienda” dijo el viceministro de Pensiones y Servicios Financieros.
Guillén también agregó que, en lo concerniente al crédito productivo éste se cuadriplicó, “teníamos aproximadamente 2.478 millones de dólares (2.031 millones de euros) en 2006 y hoy día estamos con créditos de 9.333 millones (7.649 millones de euros) de cartera dedicada a sectores económicos, aquí no está incluido el crédito de consumo, ni el de vivienda, solamente el crecimiento destinado tanto a servicios, comercio y sector productivo”, aseveró.