La confianza de los consumidores en Alemania se ha mantenido estable en una encuesta publicada el miércoles sobre las perspectivas para septiembre. Los expertos han señalado que esto sugiere que el gasto de los hogares seguirá apuntalando la economía más importante de Europa.
El indicador de la confianza del consumidor GfK, que se basa en una encuesta realizada entre 2.000 alemanes, se ha mantenido sin cambios en 9,7 puntos, al igual que el mes anterior. La cifra ha superado las previsiones de la encuesta de Reuters entre analistas, que habían proyectado un descenso a 9,6.
El gasto de los hogares es uno de los pilares importantes de la economía en Alemania, especialmente en estos momentos en que las exportaciones se han debilitado. La demanda interna se ha visto impulsada por un nivel récord de empleo, aumentos salariales superiores a la inflación y un coste reducido de los préstamos.
Entre los meses de abril y junio, la economía de Alemania se ha contraído un 0,1% debido a la debilidad de las exportaciones, lo que pone de relieve el talón de Aquiles de Alemania en una coyuntura de debilitamiento de la demanda externa, escalada de las disputas comerciales e incertidumbre en torno al Brexit.
Rolf Buerkl, analista de GfK, ha señalado que “los consumidores están entrando en un torbellino económico” y ha agregado que el subindicador de expectativas económicas de la encuesta ha caído a su nivel más bajo en más de seis años y medio.
El experto ha detallado que “los conflictos comerciales con Estados Unidos y la amenaza de aranceles para las exportaciones alemanas, así como las negociaciones en curso sobre el Brexit y la perspectiva de un Brexit sin acuerdo, significan que los consumidores están viendo un mayor riesgo de recesión en Alemania”.
No obstante, las expectativas de ingresos han disminuido ligeramente, mientras que la propensión de los consumidores a comprar ha mejorado. Los analistas han dicho que esto muestra que ambos elementos están desafiando la actual recesión económica.