Benoit Coeure, miembro del consejo ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE), ha señalado en una entrevista que la eurozona no se está preguntando si debe o no reestructurar la deuda de Grecia, sino más bien cuál es la mejor forma de hacerlo.
En la entrevista concedida al diario francés Le Monde, Coeure ha señalado que todos los países de la zona euro quieren que Grecia siga formando parte del bloque monetario y están dispuestos a ofrecer una “solidaridad financiera sin precedentes” en la medida en que el país heleno ponga en marcha las reformas acordadas.
Por otro lado, ha dicho que “en realidad, la cuestión no es si hay que reestructurar la deuda de Grecia, sino cómo hacerlo para que sea realmente útil para la economía del país”.
En este sentido, ha hecho énfasis en que es “importante hacer esta reestructuración, sea de la forma que sea, a condición de que se apliquen medidas que refuercen la economía y aseguren la sostenibilidad de las finanzas públicas griegas”.
El miembro del consejo ejecutivo del BCE ha defendido a la entidad ante las constantes críticas por su manejo de la crisis de Grecia, asegurando que la institución siempre se ha apegado a su mandato durante todo este proceso.
Después de cinco meses de negociaciones, que trajeron como consecuencia elevados costos económicos y financieros para Grecia, Coeure considera que la crisis expuso las profundas debilidades de la toma de decisiones de la zona euro y ha hecho un llamado a establecer una mayor integración con el objetivo de tomar resoluciones duras de forma efectiva.
Para finalizar, Benoit Coeure ha señalado que “el genio de la salida de la zona euro se escapó en la crisis griega y no volverá fácilmente a la botella”.