La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) ha registrado unas pérdidas netas de 1.626 millones de euros en 2021, un 51,5% superiores a las de un año antes, aunque ha incrementado sus ingresos un 54%, lo que le ha permitido cancelar más de 1.250 millones de euros de deuda avalada por el Estado.
Según ha informado, las pérdidas responden a que la compañía, con dos tercios de su cartera con minusvalías contables (8.627 millones de euros, un 5% menos que un año antes), ha priorizado en 2021 la venta ordenada de activos sin recorrido de valor al alza, lo que permitirá optimizar la devolución de deuda en el periodo de existencia de la sociedad.
El margen bruto de negocio ha sido negativo en 434 millones de euros (diferencia entre el valor de venta y el precio de traspaso de 2012), en línea con los objetivos para el año, y supone un 19,8% de los ingresos.
La sociedad recuerda que estos ‘números rojos’ no tienen impacto en su viabilidad, dado que desde 2020 está exenta de la obligación de contar con recursos propios positivos para operar con normalidad, y asegura que las cifras presentadas «suponen el cumplimiento de los objetivos previstos de ingresos y márgenes para el ejercicio.
Sareb ha cancelado con cargo a la caja generada en 2021 más de 1.250 millones de euros de deuda avalada por el Estado, con lo que la deuda viva se sitúa en los 33.664 millones de euros. En sus nueve años de vida, ha reducido el aval de Estado en 17.100 millones de euros, el 34% del total.