Arabia Saudí está analizando el mercado petrolero mundial ante el posible impacto del coronavirus en la economía de China y el resto del mundo, así como también los aspectos básicos del mercado petrolero.
Abdulaziz bin Salman, el príncipe, ha dicho que la OPEP y sus aliados pueden responder a cualquier impacto en la estabilidad del mercado petrolero en caso de que sea necesario y ha mostrado su confianza en que el Gobierno chino y la comunidad internacional puedan contener la propagación del virus y erradicarlo por completo.
El ministro ha señalado que el impacto actual en los mercados mundiales, incluyendo el petróleo y otras materias primas, “se debe principalmente a factores psicológicos y a las expectativas extremadamente negativas adoptadas por algunos participantes en el mercado a pesar de su muy limitado impacto en la demanda mundial de petróleo”.
El lunes, el precio del crudo registró una caída de más de 2% a mínimos de varios meses, debido al temor que existe en torno a un posible aumento de los casos de coronavirus en China y los cierres de ciudades en dicho país dañen la demanda de petróleo.
El petróleo Brent ha descendido $1,36 dólares por barril, o un 2,2%, a $59,33 dólares, a las 0425 GMT, tras haber caído anteriormente a $58,68, su nivel más bajo desde finales de octubre. Por su parte, el petróleo estadounidense perdía 1,30 dólares, o un 2,4%, para situarse en 52,89 dólares, tras haber caído a 52,15 dólares, su nivel más bajo desde comienzos de octubre.
Aunque la mayoría de los mercados se están viendo afectados por la propagación del coronavirus, muchos están cerrados en Asia debido a las fiestas del Año Nuevo Lunar.
El príncipe Abdulaziz ha dicho en un comunicado que “ese pesimismo extremo se produjo en 2003 durante el brote de SARS, aunque no causó una reducción significativa de la demanda de petróleo”.
Asimismo, ha agregado que confía en que el reino y otros miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), junto con otros productores de un grupo conocido como OPEP+, “tienen la capacidad y la flexibilidad necesarias para responder a cualquier acontecimiento, tomando las medidas necesarias para apoyar la estabilidad del mercado del petróleo, si la situación lo requiere”.