El Banco Popular de China ha ingresado en el mercado 340.000 millones de yuanes (unos 51.900 millones de dólares), en la que es su segunda inyección de liquidez de esta semana.
Este movimiento busca aumentar la cantidad de liquidez disponible como preparación de las vacaciones de Año Nuevo lunar (8 de febrero), la principal fiesta del país y que suele comportar un aumento del consumo, según ha informado la institución a la agencia oficial Xinhua.
La inyección se ha realizado a través de acuerdos de recompra inversa, una operación por la que se venden valores condicionados a un acuerdo para recomprarlos en una fecha posterior.
El banco central chino anunció «repos» con un vencimiento a veintiocho días por un valor de 260.000 millones de yuanes (unos 39.700 millones de dólares) con un interés de un 2,6%.
Además, ha introducido otros 80.000 millones de yuanes (unos 12.200 millones de dólares) en «repos» a siete días y un interés de un 2,25%, que sustituyen a un paquete de 110.000 millones de yuanes (unos 16.800 millones de dólares) lanzado el pasado jueves.
La quinta inyección de liquidez en los últimos diez días se produce dos jornadas después de que la institución efectuara su mayor operación de este tipo en tres años.
El martes, el Banco Popular de China canalizó hacia las entidades financieras chinas 440.000 millones de yuanes (67.200 millones de dólares, 61.800 millones de euros).
El banco central suele inundar de liquidez el sistema financiero en las jornadas previas al Año Nuevo lunar, aunque este año ha incrementado el volumen introducido en los últimos ejercicios.