La economía de Reino Unido ha registrado la tasa de crecimiento anual más alta desde 2007, a pesar de la ralentización experimentada en el último trimestre de 2014.
La Oficina Nacional de Estadísticas británica (ONS) ha informado que el Producto Interno Bruto (PIB) británico creció un 2,6% en el conjunto del año pasado, desde un 1,7% en el año 2013, situándose como la economía avanzada de mayor crecimiento en el 2014.
Si bien la mayoría de los países aún no han facilitado datos de crecimiento en 2014, la cifra del Reino Unido permite que este país se ubique por delante de las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para otras grandes economías.
El FMI prevé un crecimiento del 2,7% para este 2015, aunque los economistas encuestados por la agencia Reuters estiman una ligera ralentización al 2,4%.
Los datos publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas muestran que el crecimiento perdió fuerza, ya que en el último trimestre del 2014 el PIB cayó al 0,5% desde el 0,7% en el tercer trimestre. Esta caída contrasta con las previsiones de un 0,6% que habían realizado los economistas del sector privado.
Joe Grice, economista jefe de la oficina de estadística británica, señaló que es “muy pronto” para decir si la ralentización va a persistir. Asimismo, comentó que “el sector servicios dominante sigue boyante mientras que la contracción ha tenido lugar en industrias como construcción, minería y suministro energético, que pueden ser erráticas”.
Por otra parte, el primer ministro de Reino Unido, David Cameron, destacó que “los datos del PIB demuestran que nuestro plan económico a largo plazo está funcionando”. “En 100 días el país tendrá que elegir entre la competencia y el caos”, añadió en referencia a las elecciones que se celebrarán el próximo mes de mayo.