Francia tiene la obligación de corregir años de desviaciones presupuestarias, ha reconocido el ministro galo de Finanzas, Pierre Moscovici, quien apuesta por que en los cinco próximos años este ajuste se lleve a cabo principalmente a través de recortes del gasto público, en vez de mediante subidas de impuestos.
«En los últimos 30 años, Francia no ha sido capaz de aprobar un presupuesto equilibrado, elevando la deuda pública a unos inaceptables 1,7 billones de euros en 2011», señala Moscovici en un artículo publicado por el diario alemán ‘Handelsblatt’. «Es nuestro deber revertir esta tendencia», asegura.
El país galo pretende alcanzar una meta de déficit del 3% del PIB en 2013 y, a partir de entonces, reducir gradualmente este desequilibrio, a pesar de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha advertido de que Francia necesitará ajustes adicionales para cumplir este objetivo.
«Es un plan ambicioso que planeamos llevar a la práctica sin caer en políticas anticuadas de subidas de impuestos y del gasto (…) En los próximos cinco años habrá más recortes del gasto que subidas de impuestos», apunta el ministro francés.