La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) de Naciones Unidas ha presentado un informe en el que advierte que la región tendrá que mantener los estímulos fiscales hasta al menos el 2022 para impulsar la reactivación económica y mitigar los efectos negativos de la pandemia del coronavirus.
El informe publicado esta semana alerta sobre los peligros de no mantener los estímulos fiscales durante los años 2021 y 2022, especialmente aquellos enfocados a los sectores más vulnerables, porque mermaría las capacidades de recuperación en la región, debido a la persistencia de la pandemia y la falta de acceso a las vacunas.
Por esta razón, los expertos del organismo de las Naciones Unidas consideran que es importante extender las medidas fiscales este año y el próximo.
Alicia Bárcena, la secretaria ejecutiva de Cepal, ha explicado que «es importante extender los paquetes de medidas fiscales durante 2021 ante la fragilidad del proceso de recuperación económica y para continuar mitigando los efectos sociales, productivos y económicos negativos de la pandemia».
Las economías de América Latina y el Caribe realizaron una media de esfuerzos fiscales del 4,6% de su Producto Interior Bruto (PIB) en 2020 para hacer frente a los efectos negativos de la pandemia del coronavirus, que dejó a la región en una situación compleja.
Del 4,6% total, el 2,5% correspondía a garantías estatales de crédito y el 1,2% restante a planes de emergencia diseñados por los gobiernos.
Las medidas puestas en marcha incluyeron alivio tributario, aumento de gasto público y el desarrollo instrumentos de liquidez, así como también una serie de acciones que se adaptaron en función con las estructuras de cada economía.
Desde Cepal han advertido de que la caída del 7,1% del PIB de 2020 no compensará por el crecimiento del 6% de 2021 y se prevé un lento crecimiento que podría posponer la recuperación hasta al menos 2023 en el mejor escenario.