La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (Fdic, por sus siglas en inglés) y la Oficina del Controlador de la Moneda (OCC) han informado que en 2022 decidirán qué actividades relacionadas con los criptoactivos son «legalmente admisibles» en la banca.
Las tres entidades reguladoras han llegado a la conclusión de que «el sector emergente de los criptoactivos presenta potenciales oportunidades y riesgos para las organizaciones bancarias, sus clientes y el sistema financiero».
Debido a este interés, las agencias gubernamentales han propuesto una hoja de ruta que les permitirá estudiar las implicaciones de los criptoactivos e informar a los bancos qué actividades son «legalmente admisibles».
Además, informarán durante el año que viene de sus expectativas con relación a la seguridad del sistema, la protección de los consumidores y el cumplimiento de la normativa.
La Fed, la Fdic y la OCC analizará si los bancos pueden prestar servicios de custodia de criptoactivos, si pueden facilitar la compraventa y si pueden aceptar criptoactivos como colaterales (garantías) de créditos.
Por otro lado, la Fed y las otras entidades estudiarán si los bancos estadounidenses tienen la posibilidad de emitir y distribuir ‘stablecoins’ y qué actividades tendrán que realizar para reflejar en sus balances. Además de evaluar la posibilidad de que se apliquen los mismos estándares de liquidez y capital que tiene que cumplir la banca a las actividades de criptoactivos.
Un criptoactivo es un tipo de activo virtual, el cual tiene su origen en la criptografía. Los diferentes criptoactivos poseen un determinado valor de mercado, el cual nos permite, en caso de poseerlos, generar ingresos al venderlos o al intercambiarlos por bienes o servicios. Los criptoactivos no se pueden falsificar o duplicar y se caracterizan por ser anónimos.